Houston - Las ultimas palabras de Abel Revill Ochoa, nacido en la localidad de Vicente Guerrero, Durango, fue ejecutado este 6 de febrero 2020, en el estado de Texas, en el sur de los Estados Unidos. "Quiero pedir perdón a mis cuñadas por todo el daño emocional que les he causado. Las quiero a todas y las considero las hermanas que nunca tuve. Gracias por perdonarme".
El hombre de 47 años había sido condenado a pena de muerte en 2003 por asesinar a cinco miembros de su familia, incluidas sus hijas de 7 años y 9 meses.
De acuerdo al Departamento de Justicia Criminal de Texas (TDCJ), Ochoa fue declarado muerto a las 18:48 hora local tras recibir una dosis letal de Pentobarbital en la prisión de Hunstville de Houston, Texas.
Ocurrió asi,
un domingo 4 de Agosto del 2002 cuando Abel Ochoa, adicto al crack, llegó a su casa ubicada en Dallas, Texas- con una pistola en la mano y comenzó a matar a tiros a su esposa, Cecilia, y a sus hijas Crystal (de 7 años) y Anahi (de 9 meses). Ademas, le disparó a su cuñada Jaqueline ya su suegro Bartolo mientras estaban sentados en la Sala.
Ese dia, el hombre llevaba 10 dias sin consumir crack pues, según afirmó durante su confesión en el jucio en su contra, había aceptado la ayuda de su familia para superar su adicción. Dos años antes de los crimenes, Ochoa había empezado a consumir y rápidamente se había vuelto edicto, endeudándose y gastándose el dinero familiar en comprar droga.
"La pistola ya estaba cargada, y entré a la sala dónde estaba mi familia. Empecé a disparar mientras estaban todos sentados en el sofa", confesó el Duranguense de Vicente Guerrero, Durango.
Su hija Crystal intento escapar corriendo hacia la cocina, pero su padre la alcanzó y la mató de cuatro tiros en la espalda.
Ademas, dejó herida de bala a otra de sus cuñadas, Alma, hermana de su esposa, quen logró escaper y avisar a la policia del crimen. De esa manera, minutos después las autoridades detuvieron a Ochoa en un cajero automático mientras inténtaba sacar dinero con una tarjeta de crédito de su esposa para comprar más droga.
A pesar de que su defense afirmó que los crimenes los cometió en medio de un delirio inducido por las drogas, el jurado decidió condenarlo a muerte. Y asi, 18 años después del horrible crimen, el duranguense fue ejecutado.
viernes, 7 de febrero de 2020
Duranguense es ejecutado en Texas por asesinar a su familia
https://www.tdcj.texas.gov/death_row/dr_info/ochoaabel.html)
Houston - Las ultimas palabras de Abel Revill Ochoa, nacido en la localidad de Vicente Guerrero, Durango, fue ejecutado este 6 de febrero 2020, en el estado de Texas, en el sur de los Estados Unidos. "Quiero pedir perdón a mis cuñadas por todo el daño emocional que les he causado. Las quiero a todas y las considero las hermanas que nunca tuve. Gracias por perdonarme".
El hombre de 47 años había sido condenado a pena de muerte en 2003 por asesinar a cinco miembros de su familia, incluidas sus hijas de 7 años y 9 meses.
De acuerdo al Departamento de Justicia Criminal de Texas (TDCJ), Ochoa fue declarado muerto a las 18:48 hora local tras recibir una dosis letal de Pentobarbital en la prisión de Hunstville de Houston, Texas.
Ocurrió asi,
un domingo 4 de Agosto del 2002 cuando Abel Ochoa, adicto al crack, llegó a su casa ubicada en Dallas, Texas- con una pistola en la mano y comenzó a matar a tiros a su esposa, Cecilia, y a sus hijas Crystal (de 7 años) y Anahi (de 9 meses). Ademas, le disparó a su cuñada Jaqueline ya su suegro Bartolo mientras estaban sentados en la Sala.
Ese dia, el hombre llevaba 10 dias sin consumir crack pues, según afirmó durante su confesión en el jucio en su contra, había aceptado la ayuda de su familia para superar su adicción. Dos años antes de los crimenes, Ochoa había empezado a consumir y rápidamente se había vuelto edicto, endeudándose y gastándose el dinero familiar en comprar droga.
"La pistola ya estaba cargada, y entré a la sala dónde estaba mi familia. Empecé a disparar mientras estaban todos sentados en el sofa", confesó el Duranguense de Vicente Guerrero, Durango.
Su hija Crystal intento escapar corriendo hacia la cocina, pero su padre la alcanzó y la mató de cuatro tiros en la espalda.
Ademas, dejó herida de bala a otra de sus cuñadas, Alma, hermana de su esposa, quen logró escaper y avisar a la policia del crimen. De esa manera, minutos después las autoridades detuvieron a Ochoa en un cajero automático mientras inténtaba sacar dinero con una tarjeta de crédito de su esposa para comprar más droga.
A pesar de que su defense afirmó que los crimenes los cometió en medio de un delirio inducido por las drogas, el jurado decidió condenarlo a muerte. Y asi, 18 años después del horrible crimen, el duranguense fue ejecutado.
Houston - Las ultimas palabras de Abel Revill Ochoa, nacido en la localidad de Vicente Guerrero, Durango, fue ejecutado este 6 de febrero 2020, en el estado de Texas, en el sur de los Estados Unidos. "Quiero pedir perdón a mis cuñadas por todo el daño emocional que les he causado. Las quiero a todas y las considero las hermanas que nunca tuve. Gracias por perdonarme".
El hombre de 47 años había sido condenado a pena de muerte en 2003 por asesinar a cinco miembros de su familia, incluidas sus hijas de 7 años y 9 meses.
De acuerdo al Departamento de Justicia Criminal de Texas (TDCJ), Ochoa fue declarado muerto a las 18:48 hora local tras recibir una dosis letal de Pentobarbital en la prisión de Hunstville de Houston, Texas.
Ocurrió asi,
un domingo 4 de Agosto del 2002 cuando Abel Ochoa, adicto al crack, llegó a su casa ubicada en Dallas, Texas- con una pistola en la mano y comenzó a matar a tiros a su esposa, Cecilia, y a sus hijas Crystal (de 7 años) y Anahi (de 9 meses). Ademas, le disparó a su cuñada Jaqueline ya su suegro Bartolo mientras estaban sentados en la Sala.
Ese dia, el hombre llevaba 10 dias sin consumir crack pues, según afirmó durante su confesión en el jucio en su contra, había aceptado la ayuda de su familia para superar su adicción. Dos años antes de los crimenes, Ochoa había empezado a consumir y rápidamente se había vuelto edicto, endeudándose y gastándose el dinero familiar en comprar droga.
"La pistola ya estaba cargada, y entré a la sala dónde estaba mi familia. Empecé a disparar mientras estaban todos sentados en el sofa", confesó el Duranguense de Vicente Guerrero, Durango.
Su hija Crystal intento escapar corriendo hacia la cocina, pero su padre la alcanzó y la mató de cuatro tiros en la espalda.
Ademas, dejó herida de bala a otra de sus cuñadas, Alma, hermana de su esposa, quen logró escaper y avisar a la policia del crimen. De esa manera, minutos después las autoridades detuvieron a Ochoa en un cajero automático mientras inténtaba sacar dinero con una tarjeta de crédito de su esposa para comprar más droga.
A pesar de que su defense afirmó que los crimenes los cometió en medio de un delirio inducido por las drogas, el jurado decidió condenarlo a muerte. Y asi, 18 años después del horrible crimen, el duranguense fue ejecutado.
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